La Reserva Federal (FED) de los Estados Unidos concluirá su reunión del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) en Washington, y determinará la nueva política monetaria para el último trimestre del año, lo cual puede significar un movimiento o no de la tasa de interés.
La FED dispuso a fines de julio una suba de 25 puntos básicos en su tasa de interés de referencia y la ubicó dentro de un rango de entre 5,25% y 5,50%, el nivel más alto de los últimos 22 años.
Los inversores y los operadores calculan que hay una probabilidad del 99% de que la FED mantenga las tasas en los actuales niveles Los analistas más optimistas dicen que la inflación ha bajado lo suficiente como para que la FED recorte las tasas de manera significativa el próximo año, mientras que la economía continúa funcionando gracias a un mercado laboral sólido.
Otros dicen que el organismo podría necesitar mantener las tasas más altas durante más tiempo del que los inversores esperan para reducir la inflación a su objetivo del 2%, mientras aún acecha la amenaza de una recesión.
Un aterrizaje suave, en el que la inflación vuelva al objetivo de la FED sin que la economía tenga que sufrir una dolorosa recesión, todavía es posible, pero no probable.
La FED también mostrará sus propias previsiones económicas y los inversores estarán atentos a los comentarios sobre la trayectoria de la inflación y el futuro de la política monetaria La reunión de dos días del banco central estadounidense comenzó el martes y no se espera que el organismo monetario suba las tasas cuando anuncie su decisión.
Los inversores y los operadores calculan que hay una probabilidad del 99% de que la FED mantenga las tasas en los actuales niveles, según una encuesta de la herramienta FedWatch de CME Group, una de las entidades bursátiles más grandes del mundo. Aun así, calculan que sólo hay un 29% de posibilidades de que se produzca un aumento en noviembre.
La FED también mostrará sus propias previsiones económicas y los inversores estarán atentos a los comentarios sobre la trayectoria de la inflación y el futuro de la política monetaria.