El Ejército de Israel bombardeó hoy los alrededores de varias ciudades fronterizas del sur de Líbano, según 2 fuentes de seguridad libanesas, luego de que el Ejército israelí revelara que había ocurrido una explosión en la valla fronteriza entre ambos países.
Una de las fuentes de seguridad libanesas informó a Télam que el bombardeo se produjo tras un «intento de infiltración» en Israel y al Manar, el canal Hezbollah libanés, agregó que tras la tentativa la frontera había sido escenario de disparos.
El Ejército israelí afirmó que había efectuado disparos de artillería en territorio libanés tras una explosión que provocó «leves daños» en la valla fronteriza.
El Ejército «está respondiendo actualmente con fuego de artillería hacia territorio libanés», agregaron las Fuerzas Armadas en un comunicado replicado por la agencia de noticias AFP.
Los bombardeos israelíes tuvieron como blanco los pueblos de Dhayra, donde alcanzaron un puesto del Ejército libanés, y Alma al Shaab, precisó la segunda fuente de seguridad, que habló bajo condición de anonimato porque no está autorizada a hablar con la prensa.
Este es el más reciente de una serie de incidentes ocurridos en la frontera entre Israel y Líbano tras la ofensiva del sábado del movimiento islamista palestino Hamás en suelo israelí, y mientras Hamás e Israel cruzan fuego por séptimo día consecutivo.
El bombardeo de Israel al Líbano se produce luego de que el número 2 del movimiento chiita libanés Hezbollah anunciara que estaban «totalmente preparados» para unirse a Hamás.
«Estamos completamente preparados, y cuando llegue el momento de actuar, lo haremos», advirtió el subsecretario general de Hezbollah, Naim Qassem, presente en una manifestación propalestina en los suburbios del sur de Beirut, la capital de Líbano.
Las declaraciones se conocen en momentos en que crece el temor de que Hezbollah, aliado de Irán, abra un nuevo frente de batalla contra Israel desde Líbano.
Los contactos «directos o indirectos», de «las grandes potencias, los países árabes y los enviados de la ONU, pidiéndonos no intervenir en la batalla, no nos afectarán», aseveró Naim Qassem, replicó la agencia de noticias AFP.
La guerra entre Israel y el grupo islamista palestino Hamás dejaba hoy al menos 3.000 muertos y cientos de miles de desplazados en la Franja de Gaza en menos de una semana.
El conflicto estalló tras la ofensiva sorpresa por mar, tierra y agua de Hamás el sábado pasado, que causó 1.300 muertos en territorio israelí y 150 rehenes.
Redacción y Télam