Fue una tregua en medio de tanto ruido –dólar por las nubes, crisis económica, clima preelectoral–, un intervalo de unos pocos días válido para descansar y tomar envión para lo que resta del año. En el fin de semana extra largo hubo una invasión de turistas, y semejante afluencia, registrada en las diferentes localidades de la Costa Atlántica, se hizo evidente al mediodía de este lunes en las rutas con un movimiento similar a los meses de temporada alta.
En Mar del Plata los operadores turísticos estiman que finalmente la ocupación alcanzó un 90%, un número muy bueno que pudo haber sido aun algo más alto porque desde la Asociación Empresaria Hotelera Gastronómica (AEHG) de la ciudad revelaron que en medio de la semana, cuando el dólar tocó los 1.000 pesos, las reservas se paralizaron. Pinamar y Villa Gesell brillaron también.
«No podemos dejar de tener en cuenta el contexto que vive el país con un 138,8% de inflación y un dólar de 1.000 pesos. Pese a eso, durante el fin de semana hemos recibido 160.403 turistas. Y si tomamos la semana completa, del lunes 9 al domingo 15, los arribos fueron de 213.705 visitantes”, explicó el presidente del Ente Municipal de Turismo de Mar del Plata, Bernardo Martín.
Según explicó el funcionario marplatense, «todos los rubros han funcionado muy bien: la hotelería, la gastronomía y la recreación. Hemos visto en la ciudad muchas familias disfrutando. Hay que tener en cuenta que si bien fue un fin de semana extra largo, hoy la inflación terrible lastima gravemente las posibilidades de viajar y, además, el día de la madre es, sin dudas, una fecha que resiente el arribo de turistas».
«Se vio gente no solo en los corredores tradicionales, sino en toda la Costa», explicó Hernan Szkrohal, vicepresidente de la AEHG. «En medio del clima de incertidumbre en que se vive, la gente termina optando por opciones conocidas, y por la vigencia y la presencia de Mar de Plata en la cartelera turística nacional somos elegidos fuertemente, como ocurrió este fin de semana».
«Empezamos un camino directo a la temporada, trabajamos durante todo el año para mantener un flujo de turismo y ahora toca trabajar para estar preparados para la época estival”, sostuvo Eduardo Palena, empresario hotelero, quien como el resto de los operadores de turismo de la Costa hizo hincapié en la importancia que tiene para el sector el programa Previaje.
Consideró que «más allá de las posturas políticas que existan debe continuar porque fue un acierto su implementación para el sector turístico”.
Las localidades satélites de Villa Gesell (Mar de las Pampas, Mar azul y Las Gaviotas), alcanzaron la ocupación plena, y en el distrito el promedio de ocupación fue del 94%. «La afluencia turística el fin de semana del Día de la Diversidad Cultural fue excepcional y gran parte de esas reservas se generaron a partir del programa Previaje«, contó Marcelo Iglesias, secretario de turismo de Villa Gesell.
Según contó, el impacto económico del crédito que los viajeros reciben al comprar los servicios turísticos mediante el programa «se convirtió en consumo» en la misma ciudad con «un impacto de gran magnitud».
Celebró el funcionario: «Fue una fiesta sin precedentes», y destacó la participación de Los Palmeras, que convocaron a una multitud sobre la Avenida 3.
El Observatorio Turístico y Económico de Pinamar registró un promedio general de 93% en sus cuatro localidades, Pinamar, Ostende, Valeria del Mar y Cariló.
El 61% de los establecimientos hoteleros lograron alcanzar su ocupación plena del 100%. «Esto significa que nuestra ciudad continúa posicionándose en todo el país como un destino de descanso durante el año y no solamente durante el verano», sostuvo Juan Ibarguren, Secretario de Turismo y Desarrollo Económico de Pinamar: «Cada vez más familias argentinas encuentran el equilibrio entre la calidad de vida, el hecho de estar rodeados de naturaleza y encontrar oportunidades de desarrollo».
Mal tiempo y tránsito cargado desde temprano para el regreso
Mar del Plata amaneció brumosa con algunos chubascos a media mañana y ya el clima no fue el mismo que el de los últimos días, cuando acompañaron el sol y la temperatura estuvo por encima de los 20°. Así, muchos emprendieron el regreso temprano, pero en esa idea confluyó la mayoría: hubo una andanada de vehículos tomando las rutas 2 y 11 hacia el norte.
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A media tarde había una marcha intensa de autos en la ruta 56, a la altura del km. 30, en Dolores, para empalmar con la 2.
Según reveló Aubasa, la concesionaria del peaje, el tráfico fue intenso desde temprano por la autovía 2. Durante la mañana, unos 2.170 autos por hora transitaron por el peaje de Samborombón. Al mismo tiempo, por el puesto de Maipú se registraba el paso de unos 1.270 vehículos cada hora, provenientes en su mayoría de Mar del Plata.
La Interbalnearia 11 también se vio cargada y, de acuerdo al informe de Aubasa, se registró el paso de 2.536 vehículos por el peaje de La Huella, en General Conesa, en el momento de tránsito intenso. En esta ruta confluyen quienes pasron el fin de semana en el Partido de la Costa, Pinamar y Villa Gesell, donde hubo cifras muy buenas también.
Mar del Plata. Corresponsal
MG