La derrota frente a Boca Juniors caló hondo en el mundo River. No sólo por ser el rival de toda su vida, sino también por haber quedado eliminado en los cuartos de final de la Copa de la Liga. El Millonario terminó primero en la zona “A” y mostró un nivel superior al resto de los equipos en la fase de grupos, pero no lo demostró en el Superclásico.
Más allá de la eliminación ante el clásico rival, lo que más dolió en el seno del plantel fue la manera en la que sucedió, con un equipo que no tuvo reacción estando en desventaja, careciendo de actitud y juego, y que, además, no supo mantener la diferencia cuando estuvo 1-0 arriba. Esta derrota representa un golpe anímico para Martín Demichelis y sus jugadores, previo a jugar contra Libertad en el estadio Defensores del Chaco, en el marco de la tercera fecha correspondiente al grupo H de la Copa Libertadores.
Hasta la caída frente a Boca en Córdoba, River había logrado dos victorias, un empate y una derrota ante este contrincante durante el ciclo Demichelis. Además, sólo había perdido contra Huracán durante el 2024, año en donde logró la Supercopa Argentina frente a Estudiantes de La Plata.
Al término del encuentro contra el Xeneize en el Mario Alberto Kempes, el plantel millonario se retiró en fila india sin dar declaraciones. La mayoría de los futbolistas se fueron muy enojados por el resultado final, y en disconformidad con las decisiones arbitrales que creen que inclinaron la balanza para el vencedor. «Su continuidad no está en duda, está trabajando muy bien», le aseguró una fuente dirigencial muy importante a Página/12. El entrenador cordobés mantendrá su cargo, ya que tiene el apoyo de la dirigencia comandada por Jorge Brito, y su contrato finaliza en diciembre de 2025.
Lo positivo para River es que tendrá revancha en lo futbolístico en poco tiempo. El cruce contra Libertad será de visitante, en un escenario que es propicio para Demichelis y compañía, para evitar el hostigamiento de su gente como muestra de disconformidad por la actuación de su equipo contra Boca.
¿Cómo queda parado Demichelis?
Por lo pronto, el encuentro en Paraguay marcará dónde está parado el entrenador de cara al futuro. Una derrota profundizará la relación con el público millonario, ya que dos caídas consecutivas generarán que sea nuevamente mirado de reojo, y hasta silbado por la manera de jugar de su equipo. Hace tiempo que el hincha no tiene empatía con Demichelis, relación que se rompió a partir de la pelea que se generó con Enzo Pérez, uno de los máximos ídolos de la institución millonaria, y los cambios inesperados que tantas veces sorprenden al público de Núñez. Además, River perdería la primera ubicación del Grupo H, y pondría en riesgo su clasificación a los octavos de final.
En cambio, una victoria traerá un poco de calma y mostrará, indudablemente, como el entrenador logró sacar al equipo del pozo anímico en el que cayó por la derrota ante Boca. Si se trae los tres puntos de Asunción, River estará a un paso de clasificar a los octavos de final de esta Copa, y cumplirá el primer objetivo de 2024.
En tanto, un empate generará murmullos con el público millonario por el andar de su equipo. Pero con el punto mantendrá el liderazgo en su zona, y dependerá de River avanzar a la próxima instancia de la Libertadores.
Las estadísticas avalan al técnico desde que asumió en noviembre de 2022 para reemplazar a Marcelo Gallardo. Ganó la Liga Profesional 2023, el Trofeo de Campeones ’23 y la Supercopa Argentina ’24. Los números de Demichelis son positivos: obtuvo el 67% de los puntos sumando todas las competencias oficiales, aunque en las tribunas del Monumental no cuenta con el respaldo de la mayoría, ya que recibió silbidos aislados en los últimos partidos.
Mas allá de ese hostil panorama, su continuidad está asegurada por la dirigencia hasta el 31 de diciembre de 2025.
¿Cómo está River anímicamente?
«El plantel está golpeado, pero por suerte tenemos un partido rápido», indicó el mismo dirigente a este medio. El bajón anímico se generó por varias razones: cayó ante el clásico rival, el rendimiento dejó mucho que desear, siendo superado en el complemento, y los bajos niveles de varias de sus figuras.
Por este motivo, atraviesa la segunda tormenta del ciclo Demichelis. La primera fue cuando quedó eliminado en la Copa Libertadores ’23, tras haber perdido por penales con Inter en Porto Alegre. Aquella derrota fue el desencadenante final en la relación Demichelis-Pérez. El entrenador había criticado frente a la prensa en un off de récord a varios de sus jugadores, y esa actitud no cayó para nada bien puertas adentro. A partir de ese momento, Demichelis pasó a ser discutido por los futbolistas, por un grupo minúsculo de hinchas, pero no por la dirigencia que siempre lo respaldó en todas sus decisiones.
«A nadie le gusta perder un partido como el de Boca, pero esto es River y tenemos un partido por Copa Libertadores. Hacemos balance de lo ocurrido y pensamos en el futuro, trabajando sobre lo que pasó», sostuvo Ignacio Villarroel, vicepresidente de River, en diálogo con Radio Continental.
El momento más delicado de este 2024 para River implica un desafío con la revancha inmediata de actuar en la Libertadores. Pero para ello necesitará que reaccionen los referentes del vestuario para cambiar la pálida imagen que dejó en el último partido.
¿Qué lideres le quedan a River?
Tras la salida de Enzo Pérez, River perdió liderazgos. Y el proceso de recambio todavía no llegó, tanto dentro, como fuera de la cancha. Más allá de que tiene jugadores que son muy escuchados como Franco Armani, un arquero campeón del mundo y el capitán, un subcapitán como Ignacio Fernández, un histórico ganador de la Copa Libertadores ’18, un vencedor de mil batallas como Milton Casco, y al mejor defensor del fútbol argentino, Paulo Díaz, el equipo de Demichelis carece de un líder en el campo de juego, que en los peores momentos saque a relucir esa característica para absorber la presión que genera ponerse la camiseta de La Banda.
A raíz de esto, la dirigencia tiene la firme intención de repatriar a un hombre de la casa, Germán Pezzella. El defensor campeón del mundo está jugando en el Real Betis de España y tiene contrato vigente hasta junio de 2025. Pero difícilmente pueda llegar en el próximo mercado de pases por su buen presente en Europa.
¿Habrá cambios en el equipo para visitar a Libertad?
A partir del poco tiempo que existe de un partido al otro, y con la idea de Demichelis de no tocar el equipo porque considera que es la mejor manera de recuperarse, River enfrentaría a Libertad con el mismo once que arrancó el Superclásico. Aunque hay jugadores que están tocados como Leandro González Pirez, que terminó con un dolor en la cintura, y Andrés Herrera muy cansado.
Tras visitar a Libertad en Paraguay, el Millonario enfrentará el 7 de mayo a Nacional en Montevideo, y podría sellar su pase a la próxima instancia de la Libertadores. Para ello, deberá ganar los dos partidos.
Lo cierto es que el Monumental hablará el 14 de mayo, en el debut en la Liga Profesional frente a Central Córdoba. Si a esa altura ya tiene el pase asegurado a los octavos de final, la derrota con Boca quedará en el olvido. Caso contrario, los problemas continuarán y los hinchas se pronunciarán a favor o en contra de Demichelis, el blanco injusto de todas las miradas.