El Gobierno de Javier Milei inauguró este lunes en Córdoba la reversión del Gasoducto Norte, que será utilizada para transportar el gas natural desde Vaca Muerta, en medio del reclamo por la suspensión de obra públicas en diferentes partes del país.
El ministro de Economía, Luis Caputo, arribó al mediodía junto al secretario de Coordinación de Energía y Minería, Daniel González, y a la secretaria de Energía, María Tettamanti, para estar presentes en la inauguración que permitirá llevar gas de Vaca Muerta a las provincias del norte argentino.
La obra aportará 5 millones de metros cúbicos diarios de gas, que llegarán a Córdoba, Tucumán, La Rioja, Catamarca, Santiago del Estero, Salta y Jujuy.
La puesta a punto de este gasoducto permitirá sustituir importaciones por 1.960 millones de dólares, según las estimaciones oficiales.
La obra cambia el sentido del flujo en el ducto que se importaba gas de Bolivia y permitirá que el gas producido llegue a las provincias del norte argentino.
El costo estimado del proyecto es de U$S 740 millones, de los que U$S 540 millones forman parte de un crédito del Banco de Desarrollo para América Latina y el Caribe (CAF) y, el resto, financiamiento de Cammesa.
La obra es una de las últimas que quedan en pie del pla «motosierra» que lleva adelante la gestión del presidente Javier Milei, que generó el reclamo de algunos gobernadores provinciales, en particular de Axel Kicillof.
«Implicó la construcción de un gasoducto de más de 100 kilómetros y plantas compresoras que permiten revertir el flujo de gas, reemplazando así el proveniente de Bolivia para abastecer a siete provincias del norte desde Vaca Muerta», destacaron desde jefatura de Gabinete.
Este lunes, el mandatario bonaerense se quejó en redes sociales por la suspensión de obras y acusó al Estado nacional de lograr un equilibrio fiscal «en bae un desastre social».
«Uno de los éxitos imaginarios que más le gusta festejar a Milei es el supuesto ‘equilibrio fiscal’ alcanzado. Ese ‘equilibrio’ se logró sobre la base de un desastre social: recorte de las jubilaciones, menor inversión en salud y educación, rebaja de impuestos a los millonarios, recorte de fondos a provincias para jubilados, docentes, transporte, seguridad y total suspensión de la obra pública. Es decir, equilibrio fiscal a costa de más desequilibrio social, más desigualdad, más dolor», posteó en X.
El mandatario bonaerense publicó su mensaje donde se muestran carteles de obras en distintas localidades que fueron paralizadas y habló de «deserción» por parte del Estado nacional de sus obligaciones en materia de desarrollo, vivienda, transporte, seguridad, derecho a la dignidad, a la salud y a la educación.
«A lo largo de esta semana estaré invitando a los intendentes de todas las fuerzas políticas a firmar con nosotros un reclamo conjunto al gobierno de Milei. Las rutas nacionales sin inversión se deterioran y se vuelven más peligrosas. Las obras abandonadas se vandalizan e intrusan. No son un renglón de una planilla, son obras que mejoran la integración, obras que educan, curan y que generan empleos. El país sin obras pierde derechos y oportunidades, pierde futuro», sentenció.
D.D.