El gobernador Gustavo Valdés se reunió rápidamente con el intendente local y una avanzada, liderada por el ministro Miguel Olivieri, estuvo en la localidad a las pocas horas.
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Tras el feroz temporal que afectó ayer a Sauce, el Gobierno provincial movió rápidamente todos sus recursos para asistir a los damnificados y normalizar los servicios básicos, como la energía eléctrica. El gobernador Gustavo Valdés se reunió con el intendente Carlos Romano y el ministro de Coordinación y Planificación, Miguel Olivieri viajó inmediatamente a la localidad para ponerse al frente de los equipos de la Provincia que llegaron al lugar.
Durante la mañana de ayer, Valdés recibió en Casa de Gobierno a Romano y, tras el encuentro, expresó a través de sus redes sociales: «Desde el Gobierno de Corrientes nos comprometemos a brindar todo el apoyo necesario para asistir integralmente al Municipio y las familias afectadas».
EN TERRENO
Liderando el despliegue de recursos provinciales estuvo Olivieri, quien dialogó con EL LIBERTADOR sobre la situación encontrada en la localidad tras el temporal. «Está llegando la ayuda de Desarrollo Social y la Dpec (Dirección Provincial de Energía de Corrientes) ya está acá; está faltando un solo equipo que está viniendo de otra localidad para sumarse a lo que es el tema más complicado, que es la caída de más de 60 postes de energía en el ejido urbano y después en la zona rural otros 20 y pico que se relevaron hasta el momento», comentó el funcionario en horas de la tarde.
La magnitud de los daños causados en los postes, hizo que hasta el cierre de esta edición no haya luz en toda la localidad, una situación que empezaría a normalizarse hoy y que tardaría algunos días en estar completamente restablecida, especialmente en las zonas más alejadas del casco urbano. «La llegada de luz hasta Sauce está asegurada y ahora están haciendo las conexiones y arreglos y levantado de la línea eléctrica dentro de la ciudad», detalló.
FAMILIAS
AFECTADAS
En referencia a los daños en las viviendas, Olivieri expresó: «Hicimos un relevamiento que arrojó un poco más de 50 viviendas con voladuras de techo en la zona urbana y unas 10 en la zona rural; con la diferencia que en la zona rural se trataban más de galerías o de galpones o lugares donde por ahí estaban animales. También hubo mucha caída de árboles y una escuela de la zona rural sufrió daños en una de sus aulas».
Al ser consultado sobre si hubo personas evacuadas, respondió: «En Sauce hay un solo señor que está evacuado, después hay unas 280 personas que están complicadas; hay un número importante de gente autoevacuada, que son las que van a la casa de los vecinos o de los familiares, y después la mayoría de la gente no quiere irse de su casa, que a las que por ahora se les está colocando plástico en los techos para que puedan quedarse ahí y, obviamente, una vez que pase el mal tiempo y que se ponga a arreglar la parte de mampostería de la vivienda, se van a poner las chapas. Obviamente que el Gobierno de la Provincia se va a hacer cargo de la compra de las chapas».
Respecto a otros elementos básicos que fueron destinados a los damnificados, destacó: «El Municipio hoy tiene elementos básicos. Nosotros hemos acercado distintas donaciones que hemos conseguido hoy a la mañana y que recién acabamos de bajar y Desarrollo Social va a estar llegando para el momento de la reconstrucción de casas. Mayoritariamente la gente está pudiendo desarrollar sus actividades para comer y demás en su casa, no obstante eso, el Municipio tiene unas ollas en algunos centros de contención, así que está organizado el tema».
Pese a la magnitud de la tormenta, que incluyó fuertes vientos y abundante lluvia, no hubo que lamentar víctimas fatales, sólo un herido. «A una persona se le cayó parte de la mampostería sobre su brazo y fue llevado a Curuzú Cuatiá para hacerle una placa, pero nada de gravedad», concluyó.
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