Puede sonar injusto. No el logro, la Copa Argentina ganada en cancha, de la mano de Omar de Felippe y su otro ejército de soldados. Puede sonar injusto que Santiago del Estero celebre su primera gran estrella gracias a Central Córdoba mientras todo el país escanee la vuelta olímpica, le cuente las costillas a un Ferroviario que también supo aprovechar -y cómo- el meteórico ascenso de los equipos de la provincia en los últimos tiempos. Y ahí entra en escena el lógico ‘creer o reventar’. ¿Todo pelota o la pata política pesa? Causalidades o casualidades, hete aquí la cuestión…
Más allá de las especulaciones, ser parte -y por vez primera- de la fase de grupos de la Libertadores 2025 aparece en el horizonte como un premio difícil de rebatir. Lo puede asegurar Quilmes, Estudiantes, Newell’s, Temperley, Huracán y el Vélez último gran campeón de la Liga Profesional, víctimas de un elenco que arrancó la competencia con Abel Balbo, continuó con Lucas González Vélez y cerró a todo milagro con OdF. Pero pensar que el fútbol santiagueño nació una noche de diciembre de 2024 en el santafesino 15 de Abril de Unión sería ningunearlo. Hay otra historia atrás.
Vélez – Central Córdoba.Foto: Prensa Central Córdoba
Central Córdoba –
El festejo de Central Córdoba con la gente
Por: Camila Corrales – Enviada especial
El fútbol en Santiago: entre la escuela y el ferrocarril
En 1899, el doctor José Santillán, director de la Escuela Profesional de Varones, pidió a Buenos Aires por un Manual de Juegos Atléticos donde el fútbol era protagonista. Así, de entrada, se jugaba -por un lado- a título intercolegial y -por el otro- entre los empleados del ferrocarril Central Argentino. A comienzos del Siglo XX se produce entonces el nacimiento de clubes surgidos de los complejos educativos y los trenes, básicamente.
En 1905 se registró el primer encuentro y lo disputaron alumnos del Colegio Nacional frente a sus pares de la Escuela de Aplicación. ¿El premio? Un tintero artístico… En 1907, se desarrolló la primera Copa local y, ocho años después, se funda la Asociación Santiagueña de Fútbol. Hasta que, un 3 de junio de 1919 (ya con dos ligas capitalinas en paralelo), surgió el Club Atlético Central Córdoba, hoy por hoy, todavía, el máximo ganador en la Madre de Ciudades, fundada en 1553 a orillas del Rio Dulce. La más antigua de la actual República.
Los Peloduros, el primer golpe de Santiago del Estero en Buenos Aires
Sin embargo, más allá de sus grandes instituciones, el primer gran golpe ocurrió en 1928 con el equipo de la Liga Cultural, que se llevó el Campeonato Argentino que nucleaba a los combinados de las principales competencias del país. En ese plantel figuraba Segundo Nepomuceno Luna, el primer santiagueño en jugar en la Selección Argentina. Extremo izquierdo de Mitre, debutó un año antes en el Sudamericano de Lima, Perú, y en su bautismo le metió a Bolivia dos goles para un 7-1.
Luego de haber sido tapa de El Gráfico y de colgarse la medalla plateada en los Juegos Olímpicos de Amsterdam 1928, Ita Luna fue crack en el 3-1 sobre Paraná en la vieja cancha de River en Libertador y Tagle, Recoleta. En un certamen pensado para la gloria de Capital o Provincia (de Buenos Aires), unos santiagueños sorprendieron a los porteños. Los dejaron sin nada. Bah, con bronca.
La prensa capitalina, por ejemplo, los denominó despectivamente Los Peloduros… Aunque tuvieron su recepción de honor en el Teatro Colón y fueron recibidos por el presidente Hipólito Yrigoyen. En su pago chico, al que llegaron en tren después de cuatro días, tuvieron tratamiento de héroes provinciales. Ah, y no hace falta aclarar que todavía no habían nacido ni Claudio Tapia ni Pablo Toviggino ni Guillermo Raed, quienes hicieron con el tiempo de Viamonte 1366 un pequeño Santiago querido…
El santiagueño Ito Luna fue tapa de El Gráfico en 1926.
Cuando Santiago volvió a asomar en el mapa del futbol argentino
Hubo excepciones a la regla, claro. Aunque todavía más en blanco y negro que en color… La Cuna del Folklore le dio al fútbol argentino a Juan Carlos Cárdenas, el Chango, aquel que le dio a Racing el mote de primer campeón nacional del mundo con su golazo al Celtic en la ruda Intercontinental 1967. También a dos campeones del mundo con la Albiceleste en 1978: de La Banda salió el Loco René Houseman y, de Fernández, Luis Galván. Pero… ¿A nivel clubes, qué?
Chango Cárdenas, santiagueño y héroe de Racing.
Apenas dos participantes esporádicos, como Estudiantes y el propio Central Córdoba, en los viejos Nacionales de AFA. El Ferroviario ya había quedado en los anales cuando en 1967 derrotó a Boca (2-1) en la Bombonera, primer triunfo oficial en Brandsen 805 de un equipo proveniente de ligas regionales. Después, con la creación desde la temporada 1986-87 de la B Nacional como nueva categoría -la primera del Ascenso-, volvió a la carga CC pero sin pena ni gloria. Hasta que en 2019 regresó a Primera y todo cambió. Mucho cambió. Ya se transitaba el quinto año sin Grondona a la cabeza.
Después de 35 años al frente de la Asociación del Fútbol Argentino, Don Julio falleció a los 82. A partir de ese momento, se produjo una engorrosa sucesión. Un rato de Luis Segura; una fatídica elección por su cargo que acabó 38-38 con 75 votantes; un bureau de la FIFA para acomodar los tantos y crear una Comisión Normalizadora presidida por Armando Pérez; y, al fin, la llegada en silencio de Tapia en marzo del 2017, apoyado por los clubes del Ascenso y los representantes del Interior.
Dos poderosos hombres de Santiago del Estero, justamente, estuvieron al pie del cañón: Pablo Toviggino, nacido en Rosario pero pope del humilde Comercio Central Unidos, el Tripero, -y también capo de la liga provincial-, quien se acomodó como mandamás del Consejo Federal de AFA (y fue top en la CD de Barracas Central); y Guillermo Raed, vicepresidente 3° y responsable de Mitre, el Aurinegro. Han sido mano derecha, izquierda y las dos piernas de Chiqui. Incluso, muchas veces, su propia voz. O un simple tuit.
Toviggino con Tapia.
Fue un antes y un después. Había sido, se dijo desde un comienzo, un creer o reventar. Desde ese instante, el fútbol de Santiago se recuperó. Desde un estadio Único -gestión Gerardo Zamora- que gozó a la Selección Argentina y a finales varias del deporte nacional hasta un listado de instituciones que intentan ser de elite, a lo Central Córdoba.
Mitre, el Aurinegro de Santiago que sueña con el ascenso a Primera.
Güemes, protagonista de la Primera Nacional.
En la Primera Nacional, por caso, Mitre y Güemes. Tal vez, este fin de semana, se sume Sarmiento de La Banda, polémico protagonista del Federal A, que definirá un mano a mano en Córdoba contra Los Andes. Y tras un arranque en el Regional Amateur con 16 participantes provinciales, por los cuartos de final de la Región Centro se cruzarán Central Argentino de La Banda y Vélez Sarsfield de San Ramón pensando por el ascenso. Podrá sonar injusto pero…
Sarmiento de La Banda quiere dejar el Federal A.
Clubes de Santiago del Estero en el Planeta AFA/Consejo Federal durante 2024
-Liga Profesional: Central Córdoba
-Primera Nacional: Mitre y Güemes
-Federal A: Sarmiento de La Banda
-Regional Amateur: Central Argentino, Vélez de San Ramón y Unión Santiago (Liga Santiagueña); Unión Obrera (Liga Loretana); Argentinos (Liga Termense); Juventud Unida y Unión Talleres Fábrica de Weisburd (Liga Quimiliense); Fútbol Infantil Diego Armando, Real Madrid de Potrero Bajada y San Martín de Los Ojitos (Liga del Noroeste); San Martín y Quilmes de Monte Quemado (Liga Copeña); 120 Viviendas y Talleres General Belgrano (Liga Añatuyense); y Central Córdoba e Instituto Tráfico (Liga Friense).
Los equipos santiagueños del Regional Amateur contaron con la banca del gobierno provincial. (foto Prensa Gobierno de Santiago del Estero)
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