Jorge Alberto Gueglio, de 75 años, fue hallado sin vida en su departamento del microcentro de Rosario, con heridas punzantes en distintas partes del cuerpo. El crimen se había dado el 15 de octubre, pero no fue hasta 24 horas después que lo hallaron sin vida.
Con la llegada de la Policía se comprobó que faltaban pertenencias de la víctima. Según fuentes oficiales, el crimen trascendió cuando la hija del dueño de la vivienda se presentó en el lugar, un edificio de Santa Fe 1247, debido a que no podía comunicarse con su padre. Como no tenía éxito para ubicar a su progenitor, la mujer decidió ir hasta la casa y fue hallado sin vida el 16 de octubre.
Según trascendió, el hombre estaba en su habitación, boca abajo e inconsciente. Los médicos lo examinaron y constataron que ya había fallecido. Tenía marcas de golpes en su cabeza y al menos siete puñaladas en el pecho y el rostro.
La hija del hombre aseguró que dentro del departamento faltaban varios elementos de valor, por lo que algunos interpretan que podría tratarse de un robo.