Los ataques sucedieron cerca de una parada de colectivos. Tras la agresión huyeron hacia la zona del barrio Arazaty, donde se ocultaron por un rato para luego volver a perpetrar otros hechos. En algunos casos, usan menores para pasar desapercibidos.
En las últimas semanas, se ha reflejado varios ataques ocurridos en el barrio San Martín y el límite del barrio San Benito, transformados en la “zona roja de la inseguridad” desde hace un tiempo. Ayer, entre las 15 y las 19:30, otra vez volvieron los ataques. Uno incluyó el uso de arma de fuego para amedrentar a la víctima. El último fue perpetrado por una pareja con un niño en brazos que robó un teléfono iPhone en la misma zona. La particularidad en varios de los casos es que los maleantes huyen impunemente siempre hacia la zona del “Empachado”, dentro del barrio Arazaty, donde la Policía suele ser recibida a piedrazos.
Uno de los ataques ocurrió alrededor de las 15:06 por calle General Paz casi Alberdi, donde un delincuente solitario y a bordo de una motocicleta de 110 cilindradas color gris -captado por varias cámaras de vigilancia de la zona- individualizó a su víctima, una mujer joven y que caminaba sin compañía y no dudó en atacarla. Subió con la moto sobre la vereda y allí comenzó a amenazarla para que le entregue el bolso que llevaba consigo.
La víctima solo atinó a pegar un grito y tratar de huir. Lo mismo hizo el delincuente al ver que de la vereda contraria un vecino que había advertido lo sucedido salió en defensa de la joven con un elemento contundente en la mano que se lo arrojó al motochorro cuando huía a alta velocidad. Pocos metros más adelante, otro vecino le salió al cruce portando un tacho de basura y también se lo arrojó. Los dos objetos impactaron contra el sujeto, pero no lograron voltearlo y pudo escapar. La mujer salió corriendo del lugar. Los vecinos llamaron a la Policía, pero ya era demasiado tarde.
Solo 40 minutos más tarde y a pocas cuadras, por calle Blas Parera, sucedió otro ataque de motochorros cuya víctima fue otra mujer solitaria. Esta vez fue más grave, ya que según los reportes se trató de dos sujetos armados que tomaron por asalto a su víctima para robarle las pertenencias. Vecinos reportaron el hecho y de inmediato el sistema 911 direccionó las patrullas a la zona, pero nuevamente los delincuentes se salieron con la suya. Huyeron impunemente.
Más tarde, cerca de las 19:30, un tercer hecho. Esta vez por Necochea, a pocos metros del ingreso al barrio Arazaty, volvió a movilizar a la Policía. Los involucrados fueron un hombre y una mujer joven a bordo de una motocicleta y con una criatura en brazos. Sustrajeron un teléfono iPhone 16 a una persona y huyeron hacia la costanera.
En la mayoría de los hechos en los que hay registros fílmicos de los robos, los maleantes huyen raudamente hacia la zona conocida como “Empachado”, una especie de gueto dentro del barrio Arazaty y a solo 100 metros del mayor paseo turístico de la capital correntina donde la Policía no es bienvenida y cuando logran ingresar es recibida a piedrazos, con serios daños para las patrullas y a veces con personal lesionado. Hasta ahora nadie puede frenar esta situación. Todos los hechos sucedieron en jurisdicción de la Comisaría Segunda, que suma quejas entre los vecinos.