La digitalización empresarial en América latina vive un momento de inflexión. Mientras algunos países avanzan a paso firme hacia la modernización tecnológica, otros enfrentan obstáculos que retrasan su transformación.
¿Cuáles son los principales impulsores y frenos de la digitalización en la región? ¿Qué sucede en la Argentina, uno de los países con mayor rezago según los últimos estudios? Joel Flores, director de cuentas corporativas y estratégicas de la empresa informática india Zoho para América latina, aportó ante iProfesional su visión sobre los retos y oportunidades que enfrentan las empresas en su camino hacia la digitalización.
La transformación digital en los lugares de trabajo de América latina ha sido impulsada, principalmente, por la adopción de modelos de trabajo híbrido y remoto, y por la consolidación del software como servicio (SaaS, sigla en inglés).
México y Chile lideran, la Argentina y Colombia quedan rezagadas
El informe de madurez digital revela que México y Chile lideran la transformación digital en la región, mientras que la Argentina y Colombia muestran rezagos significativos. Estas diferencias se atribuyen a una combinación de factores económicos, regulatorios, culturales y de infraestructura.
«El entorno económico y social resulta clave para la adopción de tecnología, algo evidente en estos países. Gran cantidad de organizaciones en la Argentina y Colombia aún tienen temor de invertir ante la incertidumbre que les genera el cambio en las políticas monetarias y económicas que están viviendo estos países actualmente», señaló Flores. La falta de estabilidad limita la planificación a mediano y largo plazo, frenando proyectos de transformación digital.
Además, la cultura organizacional juega un papel relevante. Muchas empresas, especialmente las más tradicionales, enfrentan una resistencia interna al cambio que frena su evolución digital. «El temor a modificar procesos establecidos, perder control o enfrentar fallos en nuevas implementaciones puede generar una parálisis en la toma de decisiones», explicó Flores. En contraste, México y Chile muestran un avance más marcado gracias a una mayor inversión privada en tecnología y políticas más estables para fomentar la digitalización.
El rol de la conectividad y el precio de las aplicaciones
La disponibilidad de conectividad y la reducción en los precios de las aplicaciones son dos elementos indispensables para democratizar el uso de las tecnologías en las empresas. «En la medida en que las compañías, incluso las más pequeñas, cuenten con opciones de conectividad con precios adecuados y que les permitan acceder a las aplicaciones que necesitan en sus empresas para mejorar sus procesos, se facilitará su transición hacia modelos de trabajo más modernos», sostuvo Flores.
La falta de infraestructura tecnológica y el alto costo de acceso a soluciones digitales siguen siendo barreras importantes en países con menor desarrollo digital, mientras que en naciones con mejores niveles de infraestructura, como Chile y México, la digitalización avanza más rápido.
¿Por qué el rezago de la Argentina en madurez digital?
La Argentina tiene el puntaje de madurez digital más bajo entre los países evaluados, con solo 58,8 puntos y se ubica en el nivel 2.b, que indica una etapa de adopción tecnológica incipiente. Las causas principales de este rezago son la baja inversión en tecnologías para los puestos de trabajo, la persistencia de procesos manuales y la falta de una estrategia digital clara.
«Este puntaje muestra una fotografía de un momento en que las empresas argentinas están realizando inversiones en tecnologías para los puestos de trabajo, por debajo del promedio en América Latina. Esto se traduce en una baja automatización de procesos y un uso extendido de herramientas manuales», explicó Flores. Además, muchas organizaciones argentinas tienen estructuras de trabajo rígidas y carecen de una visión estratégica para la digitalización.
La resistencia a la digitalización y la automatización
El 48% de las empresas argentinas sigue gestionando sus tareas de forma manual y solo el 10% ha adoptado la automatización. «Este fenómeno podría estar asociado a diversos factores externos a las organizaciones, como los cambios que enfrenta el país en política monetaria y que terminan retrasando las inversiones. Los empresarios esperan el mejor momento antes de realizar este tipo de gastos, que en su mayoría están atados al precio del dólar», detalló Flores.
Pero también hay factores internos: el miedo al cambio y a la pérdida de control, la falta de formación y capacitación en nuevas tecnologías y la poca integración entre áreas tecnológicas y de negocio. «Más allá de los retos económicos del país, parece existir una fuerte resistencia al cambio entre las organizaciones, que muchas veces los lleva a seguir haciendo las cosas como siempre», agregó el ejecutivo de Zoho.
Joel Flores
Impacto en productividad, competitividad y experiencia de los empleados
La baja adopción tecnológica afecta directamente la competitividad y productividad de los empleados argentinos frente a sus pares de otros países. «El uso de nuevas tecnologías reduce las posibilidades de error; permite llegar fácilmente hasta nuevos mercados; eleva la calidad del servicio a clientes; los libera de la carga de realizar labores repetitivas, y les permite identificar nuevas oportunidades de negocio», afirmó Flores.
Las herramientas tecnológicas ayudan a los empleados a identificar oportunidades más rápidamente, aumentar su satisfacción laboral y enfocarse en tareas más estratégicas. Sin embargo, la falta de digitalización limita estas ventajas y expone a las empresas argentinas a una creciente desventaja competitiva.
Desafíos en seguridad digital y recomendaciones
La Argentina presenta uno de los niveles más bajos de seguridad digital en la región. Los principales desafíos son la alta dependencia del correo electrónico para gestiones internas, la ausencia de protocolos robustos de protección de datos y la baja inversión en infraestructura cibernética. «Esta combinación de factores expone a las organizaciones a riesgos crecientes, como filtraciones de información, ataques de phishing y accesos no autorizados», advirtió Flores.
Para superar estos retos, el experto recomendó implementar herramientas que garanticen la privacidad de los datos, el uso de funciones de identificación avanzadas (biométricas o doble autenticación), establecer políticas claras de seguridad de la información y realizar auditorías periódicas para detectar vulnerabilidades. «También es importante capacitar a los empleados para que identifiquen los riesgos y adoptar estándares internacionales de protección de la información», agregó.
Aprendizajes de los sectores líderes
El sector tecnológico lidera la madurez digital en la región, seguido por finanzas y gobierno. «Los sectores tecnológico, financiero y gubernamental han demostrado que una transformación digital exitosa no ocurre por accidente, sino que requiere una hoja de ruta clara y bien definida. Esta planificación estratégica permite alinear los objetivos del negocio con las herramientas tecnológicas adecuadas, facilitando la modernización de procesos y una mejor experiencia para los usuarios o ciudadanos», aseguró Flores.
Otros sectores pueden aprender que este enfoque planificado es esencial para evitar esfuerzos aislados, costosos o ineficaces. Además, estos sectores han apostado por inversiones clave en plataformas de automatización y promueven la capacitación continua de sus equipos para adaptarse al cambio. «También han entendido el valor de contar con unidades internas dedicadas a la innovación y transformación digital, capaces de liderar el cambio desde dentro y fomentar una cultura de mejora constante», señaló el ejecutivo.
Casos de éxito en la Argentina
Aunque la digitalización avanza lentamente, existen casos de éxito que pueden servir de inspiración. «La transformación digital ya es una realidad para empresas argentinas en todos los sectores, que han apostado por integrar automatización, trabajo remoto eficiente y protocolos de ciberseguridad robustos», afirmó Flores. Ejemplos como Transportes Tortoriello, que ha creado aplicaciones personalizadas para hacer seguimiento a sus vehículos, o el club Atlas, que utiliza CRM para gestionar los datos de sus hinchas, muestran que el cambio es posible.
Herramientas más adoptadas y mayor resistencia
Las herramientas más adoptadas en las oficinas latinoamericanas son aquellas que permiten modelos de trabajo híbridos o remotos: plataformas de videollamadas, almacenamiento en la nube y calendarios digitales. «En este caso, las plataformas de videollamadas, almacenamiento en la nube y calendarios digitales suelen ser las más utilizadas en los puestos de trabajo», señaló Flores.
Sin embargo, existe una gran resistencia a utilizar soluciones dedicadas a gestión de proyectos y automatización de tareas. «En estos casos, podría tratarse del miedo a perder control sobre las actividades», explicó el experto.
Estrategias para una adopción tecnológica sostenible
La capacitación y la integración efectiva son claves para el éxito de la transformación digital. «Para lograr una adopción tecnológica sostenible en las empresas argentinas es clave comenzar con cambios graduales que permitan adaptarse sin generar resistencia ni interrumpir las operaciones. Este enfoque progresivo reduce el riesgo y permite ir aprendiendo en el camino», recomendó Flores.
Es fundamental involucrar a los empleados en la elección de las herramientas, ofrecer capacitaciones continuas y medir el impacto de cada implementación. «Otra estrategia fundamental es ofrecer capacitaciones continuas para que los equipos desarrollen habilidades digitales de manera constante y puedan aprovechar al máximo las nuevas tecnologías. Finalmente, medir el impacto de cada implementación y estar dispuestos a hacer ajustes permite optimizar recursos y asegurar que las decisiones tecnológicas realmente aporten valor al negocio», agregó el ejecutivo.
Obstáculos para la adopción de inteligencia artificial
La adopción de inteligencia artificial avanza lentamente en la Argentina. Los principales obstáculos son la falta de conocimiento técnico, la ausencia de casos de uso claros y el temor a la pérdida de empleos. «Los obstáculos para la adopción de la inteligencia artificial y la automatización en las empresas suelen estar ligados a una combinación de factores, que van desde la falta de conocimiento técnico y la ausencia de casos de uso claros hasta el temor a la pérdida de empleos, entre otros», explicó Flores.
Para avanzar, es fundamental transformar la percepción con acciones concretas: mayor divulgación de los beneficios, pilotos internos exitosos y líderes que impulsen la innovación desde dentro. «Una de las claves está en una mayor divulgación de los beneficios reales que estas tecnologías pueden ofrecer, como la mejora en la productividad, la eficiencia operativa y la mayor capacidad de competir en mercados globales», señaló el experto.
Oportunidades de la inteligencia artificial
La inteligencia artificial representa una gran oportunidad para impulsar la productividad y la seguridad en los lugares de trabajo argentinos. «Una de sus principales ventajas es la capacidad de automatizar tareas repetitivas y operativas, lo que libera tiempo para que los colaboradores se enfoquen en actividades de mayor valor estratégico y creativo», afirma Flores.
La IA también puede transformar la experiencia del cliente y fortalecer la ciberseguridad. «Con herramientas de monitoreo predictivo, es posible detectar amenazas en tiempo real y anticiparse a posibles vulnerabilidades antes de que causen daños», agrega el ejecutivo.
Acciones concretas para acelerar la transformación digital
Las empresas argentinas deben tomar acciones concretas para no quedar rezagadas: adoptar un enfoque gradual en la digitalización, invertir en capacitación continua, promover el liderazgo digital y medir el impacto de las iniciativas tecnológicas. Además, deben apostar por la automatización de tareas simples y la integración de soluciones de seguridad robustas.
Evolución de la madurez digital en la Argentina: ¿Qué esperar en cinco años?
En los próximos cinco años, la madurez digital en Argentina podría evolucionar positivamente si se logra estabilidad económica, mayor inversión en tecnología y una cultura organizacional más abierta al cambio. Los indicadores clave a monitorear incluyen el nivel de automatización de procesos, la adopción de soluciones de seguridad digital, la formación continua de los empleados y el impacto de las iniciativas tecnológicas en la productividad y la competitividad.
La digitalización de las empresas en América latina es un proceso complejo, marcado por avances y rezagos. La Argentina enfrenta importantes desafíos, pero también oportunidades para transformar su realidad empresarial. La clave está en la planificación estratégica, la capacitación continua, la integración efectiva de las tecnologías y el fortalecimiento del ecosistema digital a través de alianzas público-privadas y políticas gubernamentales.
Como señaló Flores, «solo con un ecosistema fortalecido y una visión a largo plazo se podrá acelerar la adopción tecnológica de forma sostenible». El camino hacia la digitalización no es fácil, pero es posible y necesario para no quedar rezagados en un mundo cada vez más conectado y competitivo.