Un delincuente casi muere ahogado luego de tragarse un pedazo de pared para escapar de una comisaría de Neuquén en medio de un intento de motín. El ladrón y su cómplice habían sido detenidos por diversos robos bajo la modalidad de motochorros.
El hecho ocurrió en la tarde del domingo, cuando dos delincuentes a bordo de una moto interceptaron a un adolescente de 13 años, lo golpearon y le robaron un morral en el que tenía su celular.
Minutos después, la Policía de Neuquén recibió un llamado de vecinos del barrio Balcón del Valle, donde advertían que habían retenido a uno de los ladrones, de 26 años, pero que el otro había logrado escapar.
A su vez, otro vecino alertó en un grupo de WhatsApp que había visto a un joven arrastrando una moto que coincidía con la descripción de las denuncias. Los efectivos se movilizaron hasta las calles Chubut y La Rioja, donde lograron arrestar al ladrón, de 24 años, quien a su vez era familiar del primer detenido.
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«Se estaba poniendo azul y casi no respiraba»
Medios locales detallaron que, durante su arresto, el joven puso agresivo contra los agentes policiales y les arrojó el celular que le había robado al adolescente.
Ambos ladrones fueron trasladados al Hospital Natalio Burd de la localidad de Centenario e incluso durante el trayecto uno de ellos intentó escapar, aunque no lo logró.
La violenta resistencia continuó cuando llegaron al hospital y uno de los delincuentes empezó a escupir a los efectivos, lo que provocó que se interrumpa la atención médica y se los trasladara a ambos a la Comisaría Quinta.
Una vez en la dependencia policial, el delincuente de 26 años comenzó a lesionarse y fue esposado. Sin embargo, la situación escaló cuando ambos rompieron una pared y le comenzaron a arrojar escombro a los efectivos mientras arengaban a otros internos a iniciar un motín. En medio del caos, uno de los delincuentes se tragó un pedazo de escombro y comenzó a ahogarse.
Los policías solicitaron una ambulancia al hospital y procedieron a realizarle la maniobra de Heimlich: “Ya se estaba poniendo azul y casi no respiraba», publicó el medio Centenario Digital. Finalmente, el joven expulsó el pedazo de pared que le había provocado el ahogamiento.
En paralelo, otro de los demorados comenzó a correr por el pasillo interno de la comisaría, intentando escapar, pero fue interceptado por personal policial.
En un mismo día, la policía había recibido varios llamados con denuncias sobre el par de delincuentes. Además del robo al adolescente de 13 años, otro joven fue asaltado en la Plaza Bicentenario y un hombre que fue víctima de un robo a la vera de la Ruta 7.
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