El gobernador de Chubut, Ignacio Torres, aseguró que 2024 es el ciclo lectivo con más días de clases en esa provincia de los últimos 25 años, aunque sigue lejos del calendario de 190 días acordado por el Consejo Federal de Educación (CFE). Este año ya alcanzaron 144 jornadas efectivas de clase y prometen lograr los 190, en 2025.
A la crisis educativa que enfrenta el país, en la provincia de Chubut se sumó uno de los conflictos gremiales más intensos y problemas estructurales que llevaron a sucesivos paros gremiales: se perdieron casi dos de los últimos 10 años de escolaridad, entre 2013 y 2023. En 2019, por ejemplo, lideró el ranking nacional con menos cantidad de días de aulas abiertas, sumando 17 semanas seguidas de huelgas.
Este año, en cambio, según el relevamiento de la organización Coalición por la Educación, hasta agosto pasado llevaban un 75% de cumplimiento de los días de clases planificados. En la primera mitad del año apenas tuvieron cuatro días sin clase y se ubicaban casi al final de la tabla, en el puesto 19. La larga crisis en materia educativa encontró su máximo punto durante la gestión del entonces gobernador Mariano Arcioni (2017-2023), cuando las medidas de fuerza se volvieron un problema crónico.
El pago escalonado de salarios, ante la imposibilidad de cumplir con una paritaria que el propio Arcioni había cerrado en tiempos de campaña electoral, sumó en 2019 unos 170 días de paro docente. A su vez, se multiplicaban las críticas por falta de calefacción y problemas de infraestructura escolar en una provincia donde el frío puede jugar más de un inconveniente serio. La Oficina de Derechos y Garantías de Chubut tenía relevados, en noviembre del año pasado, 26 escuelas con problemas edilicios solo en la ciudad Comodoro Rivadavia: inconvenientes por falta de calefacción, roturas de baños, falta de bancos o problemas en techos y en otras instalaciones.
El gobernador Torres destacó que en este ciclo lectivo se alcanzó un total de 144 días efectivos de clases, superando ampliamente los 120 días registrados en 2023, y anticipó que para 2025 se implementará un calendario escolar extendido de 190 días, un hito sin precedentes que buscará consolidar la continuidad educativa en la provincia. “Después de 25 años, logramos revertir un ciclo de inestabilidad educativa que afectaba a miles de estudiantes. El éxito de este año no se debe a fórmulas mágicas, sino al hecho de que los chicos estuvieron en las aulas. Esto demuestra que cuando priorizamos la educación, se notan los resultados”, afirmó.
“Estamos finalizando un año sumamente exitoso, donde no solo logramos cumplir la meta de días de clases, sino que también mejoramos la calidad académica”, sostuvo el mandatario que, acompañado por el ministro de Educación de Chubut, José Luis Punta, presentó un informe detallado del plan rducativo implementado durante el primer año de gestión.
El gobernador, que tomó la situación educativa como una de sus banderas políticas, calificó la situación de la provincia como una “tragedia educativa”. Al respecto, explicó: “Había familias que tuvieron que irse de la provincia para garantizar la educación de sus hijos, y muchos chicos de primaria no sabían leer ni escribir. Esa realidad nos impulsó a tomar decisiones firmes y a convocar a todos los actores del sistema educativo para trabajar juntos en el programa Juntos por la Educación”.
Según un relevamiento que hizo la provincia y difundió al presentar en mayo pasado su plan de alfabetización cinco de cada 10 estudiantes de tercer grado de Chubut no comprenden conceptos matemáticos básicos y carecen de habilidades de resolución de problemas. En la misma proporción, se identifican dificultades para identificar detalles relevantes en un texto, habilidades de redacción limitadas, así como carencia de conciencia ortográfica y gramática.
En sexto grado, cinco de cada 10 estudiantes chubutenses presentaron errores en cálculos básicos, y comprensión limitada de los números y operaciones. En el área de Lengua los resultados fueron aún peor: siete de cada diez alumnos tienen dificultades para identificar detalles relevantes en un texto, además de habilidades de redacción limitadas y carencia de ortografía y gramática.
El gobernador mencionó la implementación de nuevas leyes educativas, como la de profesionalidad para mejorar el papel del docente y la inclusión en la currícula de educación financiera, robótica e inteligencia artificial. Torres aseguró que más del 25% del presupuesto de la provincia fue destinado al sistema educativo y prometió aumentar ese porcentaje para el año próximo. “En 2025, más del 25% del presupuesto va a estar abocado al futuro de la educación pública, porque entendemos que es la base para transformar la realidad de Chubut”, afirmó.
Chubut no es la única provincia con graves deficiencias en el sistema educativo, motivado especialmente por los conflictos gremiales. Santa Cruz lidera el cronograma con más días de aulas cerradas, problema que arrastra desde hace varios años. Por ejemplo, en 2017 los alumnos llegaron a sufrir 117 días de huelgas y paros lo que determinó que se alejaran fuertemente del calendario nacional que intentaba tener 180 días de clase. En 2016, en tanto, los estudiantes santacruceños no tuvieron clases por 90 días. Tierra del Fuego también tuvo conflictos y las aulas permanecieron cerradas por huelgas durante 70 días a lo largo de ese mismo período. En aquel año, Neuquén completaba la trilogía de la peor situación con 20 días sin clases.
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