A casi cinco días de haber cometido el homicidio, la Policía finalmente atrapó al sujeto señalado como quien atacó a golpes a Julio Fernández, el cuida motos, hallado muerto en un descampado cercano a la Escuela 402 en el barrio San Benito. El sospechoso se había presentado a trabajar luego de haber faltado el día posterior al homicidio. La familia de la víctima tiene miedo de que estén intentando encubrirlo y aseguran que pese a que todos los testigos lo señalaron y ya estaba hecha la primera denuncia, “andaba muy tranquilo y hasta se fue a trabajar como si nada”, contó Elena, sobrina del hombre asesinado.
Fue en la mañana de ayer, cuando una comisión policial de la Comisaría Segunda encabezada por su comisario en jefe, llegó hasta el anfiteatro José Hernández y concretó la detención de a V. R. Fernández, alias “Titón” de 52 años, quien se había presentado normalmente a trabajar, y de hecho estuvo barriendo algunas calles, según indicaron fuentes consultadas.
Horas antes, Delia Fernández, la hermana de Julio, se había presentado en la fiscalía a hacer una ampliación de denuncia y allí lo mencionó de nuevo al sospechoso. La mujer también preguntó por qué aún no estaba detenido cuando ella ya lo había mencionado al hombre el mismo día del hecho.
Al parecer y pese a que ya era de público conocimiento lo sucedido, desde la semana pasa, la Justicia lo tenía como presunto autor de la muerte de Walter Julio Fernández, a través del Preventivo N°495/24, aunque tras el hecho, el sujeto no volvió a su casa por calle Elías Abad y se mantuvo “escondido” hasta que contactó a un abogado y recién allí, cuando se enteró que nadie lo buscaba, “volvió a trabajar, muy tranquilo, como si nada”, sostuvo Elena.”Titón” Fernández no guarda ningún parentesco con la víctima, solo comparten apellido, aunque ambos se conocían y mantuvieron algunas “rondas de tragos” en el pasado junto a otros amigos en común. No había problemas entre ellos, o al menos nada que haya hecho prever lo que la mañana del jueves 21 pasaría frete a la vereda de un conocido supermercado de la calle Alberdi casi avenida Teniente Ibáñez, en el barrio San Benito de la capital correntina.
Según el certificado de defunción que posee la familia de Julio Fernández, el cadáver presentaba un “hematoma epidural, politraumatismos varios, fractura en la base del cráneo provocado por un objeto duro”.
“No podemos entender cómo es que estuvo cinco días libres, pudo haberse fugado a cualquier lugar; cómo la Policía no lo detuvo pese a que había muchos testigos que señalaron a este sujeto como el autor de la golpiza. Tuvimos muchas trabas para poder hacer la denuncia. En la comisaría no nos dieron ninguna copia y nos mandaron a hacer la ampliación a la fiscalía. Tenemos miedo de que se esté intentando encubrirlo. Que mi tío haya estado en la indigencia, no quiere decir que alguien tenga el derecho de quitarle la vida. Nosotros vamos a buscar que se haga justicia por él”. Tras su detención, “Titón” Fernández fue trasladado a la comisaría Segunda, donde quedó a disposición de la Justicia. El fiscal Gustavo Roubineau es quien tiene hoy la causa por la muerte de Julio Fernández.
Cabe recordar que el hecho fue descubierto luego de hallar el cuerpo en un descampado. Un rato antes había recibido una brutal paliza de parte del acusado, tras una discusión sin sentido.